domingo, 9 de diciembre de 2012

Un caballo de Troya dentro de mi.



Esperanza muy decaída, anoréxica y con fiebre.



Estoy inscrito al boletín del Reino Unido "Normas alimentarías" donde he leído que en Gran Bretaña unas mil personas al día –350 mil al año se infectan con Toxoplasma gondii  probablemente por contacto directo con gatos. 


Mis "cuates" que también investigan en Inglaterra me han confirmado que este parásito unicelular pasa del intestino humano al cerebro del gato donde causa trastornos de conducta. Ellos han demostrado que el parásito es capaz de infectar las células dendríticas de los glóbulos blancos del sistema inmune y hacerlas secretar un neurotransmisor químico que permite a las células infectadas, y con ellas al parásito, cruzar la barrera protectora del cerebro

Se cree que hasta 40 por ciento de la población británica está infectada con toxoplasma y, si bien la gran mayoría no muestra síntomas, existe riesgo para los niños por nacer, si sus madres se infectaron por primera vez durante el embarazo. El toxoplasma gondii puede vivir en muchas especies, pero sólo completa su ciclo de vida en gatos, los cuales secretan el parásito en sus heces. 


Estudios han mostrado que el toxoplasma afecta la conducta de esos animales y de los ratones, haciéndolos más proclives a ser comidos por gatos, con lo cual el parásito completa su complejo ciclo de vida. El toxoplasma puede desencadenar perturbaciones psicológicas en humanos, entre ellas la esquizofrenia, si bien la investigación no ha logrado determinar una relación entre causa y efecto. Las infecciones por T. gondii tienen la facultad de cambiar el comportamiento de la ratas y ratones, haciendo que se acerquen, en vez de huir del olor de los gatos. Este efecto es de beneficio para el parásito, el cual puede reproducirse sexualmente si es ingerido por el gato.

Ustedes por mis Posts anteriores conocen un virus que en computación se llama Caballo de Troya, pues este parásito usa un mecanismo semejante. Los ilustro, este inmundo protozoo oportunista puede penetrar en el cerebro humano dando órdenes a ciertas células especiales del sistema inmune, a las cuales utiliza como caballos de Troya para entrar en el sistema nervioso central

Un amigo que trabaja en el Instituto Karolinska, en Estocolmo, Suecia, termino por clarificarme el panorama y me señalo que al ser infectadas con toxoplasma, las células dendríticas humanas, que no forman parte del sistema nervioso central, comienzan a secretar un neurotransmisor llamado Gaba, el cual es producido normalmente por las células del cerebro. Descubrir que el toxoplasma era capaz de hacer que las células del sistema inmune secretaran Gaba fue sorprendente, dijo y me  lo contó realmente sorprendido. Ademas agregó; significa que el parásito tiene la capacidad potencial de manipular el sistema nervioso central.

Mi curiosidad me hizo encender la computadora y visitar la revista en línea "PLOS Pathogens", donde supe del usó de dendritas humanas cultivadas en un tubo de ensayo, pero también que las dendritas infectadas pasan con mayor facilidad, que las no infectadas al cerebro de ratones de laboratorio. Comprobando una vez más que el parásito las utiliza como una especie de caballo de Troya para transportarse del intestino humano al cerebro.


 Por primera vez se sabe cómo se comporta el parásito en el organismo huésped, es decir, cómo entra en el cerebro y manipula al huésped apoderándose de los neurotransmisores cerebrales. No queda claro si el toxoplasma es capaz de influir en la conducta o el estado mental de personas infectadas, dada la naturaleza preliminar de los estudios. Me me puse frenético, al pensar que Esperanza fuese la causa de mi pesimismo.

Tanto yo, como mi gata Esperanza hemos visitado al veterinario. Yo completamente resfriado.

Él me miró, después observo a la gata y comento, aquí hay un felino en cautiverio, lo que yo interprete como gato encerrado. Con el fin de recabar datos para mi historia clínica, me ha preguntado primero; si había experimentado en algún  momento dentro de mi personalidad afable, un comportamiento antagónico, como llevar a cabo conductas de alto riesgo.

¡Que remedio, debí confesar mi viaje a la Antártida! Él me dijo, con su inconfundible acento chino: su viaje fue tan temerario, como la conducta de un latón infectado por acercarse al gato. Él prosiguió su interrogatorio y a su pregunta: ¿Ha notado lentitud en su reaccionar?  Le dije la verdad, que si, sobre todo después de mi visita a Chile. 

Su siguiente cuestionamiento fue:¿Ha notado en usted algún rasgo neurótico o contradicciones? .
Fue cuando muy irritado le respondí: Que en lógica, una contradicción es una incompatibilidad entre dos o más proposiciones. Por ejemplo, las oraciones "llueve y no llueve" "y ni llueve ni truena, pero llueve y truena" expresan contradicciones. En Mérida dicen "lo busco y no lo busco"


Alterado proseguí: en lógica proposicional, una contradicción se define como una fórmula que resulta falsa para cualquier interpretación, es decir para cualquier asignación de valores de verdad que se haga a sus fórmulas atómicas. Le quise dibujar una tabla para demostrarle matemáticamente una contradicción, pero me dejo hablando solo. 
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Quedamente se acercó a "Esperanza" susurrando algo en su oreja. Mi felina ronroneando, cerró sus ojos casi por completo y después movió su cabeza para mirarme, podría jurar que la vi reírse de mi.
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Los primeros análisis que me ha recomendado el albéitar, fueron una Serología para toxoplasma y un coproparacitoscopico en serie de tres. ¡No tienen ni idea la molestia e incomodidad que es poner tu excremento en un frasquito tan pequeño, durante tres días!

Termine medicado con  Pirimetamina y Sulfonaminas y mi gata también.




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